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Luna Hueca en Sunchales


Skay Beilinson presentó nuevo baterista en la ciudad de Sunchales provincia de Santa Fe. Respaldado en sus canciones solistas, hizo delirar a miles de fanáticos que llegaron de distintas partes del país.

En la vera de la Ruta Nacional 34 precisamente en el km Nº 260, se desplaza el gigante Centro Cultural Low en la localidad de Sunchales, escenario imponente que supo albergar a bandas nacionales de alto rango como Ciro y Los Persas, Divididos, Rata Blanca, Las Pelotas, Kapanga, entre otros. Luego de traspasar la rotonda la vista era ideal: colectivos de gran porte, pequeños colectivos urbanos, autos, camionetas y motocicletas coparon las banquinas de la localidad lechera que aguardaba estallar con acordes de Skay y Los Fakires.

Con un clima pesado sin presencia de vientos, las banderas ricoteras permanecían estáticas colgadas en cada esquina como estandarte. El público coreaba con ímpetu “(…) es una noche especial no te la vas a perder, toca el corazón de Patricio Rey” haciendo referencia a la banda mítica argentina la cual consagró a Eduardo Skay Beilinson.

Juan de Capital Federal me comentaba “(…) yo estaba en la Costa Argentina de vacaciones, me pasaron a buscar mis amigos por la ruta y emprendimos viaje para acá”. Añadió riéndose “(…) tenemos un conductor designado de lujo”. No eran relevantes las siete horas de viaje, el cansancio del cuerpo, no incumbía nada. “(…) Es inexplicable el sentimiento y poder compartirlo con amigos” finalizó diciendo el joven calzándose el gorro piluso de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.

Según el flyer publicitario de la Web de Skay a las 12 horas estarían sonando los primeros acordes del guitarrista, cantante y compositor oriundo de La Plata. En ése preciso momento los estéreos de los autos llegaban a sus máximos volúmenes con temas ricoteros, las brasas seguían encendidas y la vendedora que hacía remeras y trapos artesanales con su shablon en serigrafía, se hacía el día con una venta récord. Los seguidores del Flaco acostumbrados al folclore del rocanrol argentino se instalaron cómodamente en los alrededores del Centro Cultural sunchalense a la espera de otro show implacable del mítico cantante.

Llegadas las 2 de la mañana se dio el ingreso de la totalidad del público expectante. A la vista un imponente escenario de grandes estructuras, juegos de luces rítmicas modernas y los seguidores disfrutando una noche de verano al aire libre que prometía mucho. En la previa una banda en los laterales del lugar empezó a corear el famoso cántico del verano, que resonó por todos los rincones del Centro Cultural: “MMLPQTP”, fundió claramente un mensaje en rechazo con respecto a la administración oficial del Estado argentino de parte del público ricotero.

Cuando las luces se apagaron y Los Fakires tomaron el escenario, estalló el lugar y perdimos la noción del tiempo. Del álbum “A través del mar de los sargazos” del año 2002 arrancó un set prometedor con la potencia de “Gengis Khan”. Bien lo expresó Skay Beilinson: “(…) entre el polvo apareció, tronó el cielo y la tierra, él ha vuelto a la ciudad”.

Inmediatamente notamos que la propuesta del mítico artista era poder plasmar el poder de los seis impecables álbumes como solista. Del álbum del año 2010 “¿Dónde vas?” disfrutamos de “Territorio caníbal” dejando descansar (sólo un poco) los cuerpos de los espectadores como preparándolos para lo que se venía. “Oda a la sin nombre” fue coreado y alentado por la totalidad del público, siendo un tema que surgió de tantas composiciones concebidas durante la etapa en Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota.

Nuevamente los peregrinos corearon rotundamente “(…) es una noche especial no te la vas a perder, toca el corazón de Patricio Rey”. A lo que el Flaco respondió: “(…) siempre es una noche especial, miren esa luna que nos ilumina hoy”, señalando la inmensidad del cielo. En ese preciso momento se coló de modo premeditado un tema del álbum “La luna hueca” del año 2013: “Ya lo sabés” y la potencia de la guitarra legendaria de Beilinson, movilizaron intensamente a los espectadores.

Seguidamente Los Fakires transitaron por el último álbum “El Engranaje de Cristal”, interpretando un tema distinguido en composición musical “El Equilibrista”. Volviendo al álbum “La luna hueca”, interpretaron “El redentor secreto” con una performance impecable en el debut del baterista Leandro Sánchez con toda la adrenalina que esto implica.

El momento en que los peregrinos añoran el pogo más grande del mundo llega con “Ji Ji Ji” del revolucionario álbum de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota: “Oktubre”. Es movilizador pensar que estamos en presencia del brillante guitarrista que fundó los acordes de un himno del rocanrol argentino que se reproduce y se apropia de generación en generación. Posteriormente gozamos de temas como “Aves migratorias” del disco “¿Dónde van?”, la potencia de “Chico bomba” del último álbum y la excelente pieza musical “Falenas en celo” que brindaba un panorama del conmovedor momento como si la poesía se haría carne: “(…) atraídos por la luz en la noche, cegados por el resplandor de una ilusión, falenas que van a morir queman sus alas en el fuego del amor.”

Consecutivamente sonaron los acordes de “Hopi” con una interpretación estelar del Flaco Skay que nos dejó boquiabiertos. La agitación se afianzó cuando sonó en vivo otra joya ricotera: “Ésa estrella era mi lujo” del álbum “Bang! Bang!!... estás liquidado” pregonó los buenos momentos de la banda de rock más multitudinaria del país.

“Flores secas” del álbum “Talismán” fue el siguiente tema, muy coreado por los peregrinos que sentían el éxtasis de un inolvidable concierto. Le siguieron “Quisiera llevarte” del último álbum de Los Fakires, “El sueño del jinete” del álbum “La luna hueca” y el imponente tema “El golem de Paternal” dónde se pudieron vislumbrar nuevamente las habilidades del reciente baterista Sánchez.

Luego de un impase, Skay y Los Fakires salieron a desplegar todo el potencial para cerrar una velada histórica en la vuelta a esta ciudad santafecina. Sonaron “Lluvia sobre Bagdad” y “Lejos de casa”, una pieza en conexión con el instante del retorno de los peregrinos por las rutas: “(…) La carretera se extiende interminable, no tengo nada, todo lo perdí; con mis andrajos y tres perros flacos pueblos lejanos voy dejando atrás.”

Mientras que los/as seguidores/as del mítico Flaco Skay juntan esos mangos para presenciar sus imponentes shows en vivo, ModoOn los sigue en las rutas nacionales a la par con ansias de volver a deleitarse con el mejor rock argentino.

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