La noche en que Niceto club se trasformó en un refugio para zombies, Carca y Poseidótica despidieron el 2017 en medio de brumas y oscuridad tamizadas con poderoso rock.
La noche del viernes 15 de diciembre, el escenario de Niceto Club se transformó. Los aires tenebres y apocalípticos flotaban en todo el local dándole paso a lo que fue la fecha despedida del año de Carca y Poseidótica, dos representante del rock blues psicodélico de la escena nacional. Poseidótica cuenta con la emblemática presencia en sus filas de Walter Broide ex “Los Natas”, propulsor de este grupo de psicodelia y aires nebulosos de stoner rock.
El disfraz no fue sólo metafórico, ya que consecuente a la invitación de una noche oscura y apocalíptica, el escenario se plagó de tumbas y decorado simulando un cementerio en donde se leían en las lapidas las inscripciones de Carl Sagan, Sadam Hussein, Alf , un tal Darío Robinston y por último la inscripción Stoner rock.
La noche abrió con Carca al frente de un theremín que con una cortina espectral e hipnótica, maquillado para la ocasión dio inicio a la noche con No tenés un buen look de su disco Divino del año 2003. Con una magnifica interpretación de cada una de las 15 canciones que tocó en la noche, repasó toda su carrera musical, pasando por todos sus discos, para cerrar guitar slide en mano con el blues Vacaciones, donde desea “dejar a su memoria olvidada por ahí…”. Vale aclarar la intensidad y la complicidad que se vive en los shows de Carca entre “el Teacher” y su público que devuelve los estribillos cual coristas invitados las letra de las canciones. El vértigo y la presteza que va adquiriendo el trío a lo largo de cada una de sus presentaciones es notorio, al punto tal de llegar a un muy alto vuelo en la química grupal.
Luego fue el turno del grupo del ex baterista de Los Natas, Walter Broide, quien más allá de tener peso y nombre propio por su exitoso pasado Stoner; orbita en Poseidótica como uno más en una formación muy pareja y de gustoso repertorio psicodélico, onírico y nebuloso. La presentación arrancó con una memorable actuación de cada uno de los integrantes, tras el corrimiento del telón levantándose desde el piso como muertos vivientes de una tumba, maquillados a tono para correr a su instrumentos y comenzar con un colchón espeso de Stoner Rock resucitando al espíritu del género. Temas de sus discos El Dilema del Origen, Crónicas del Futuro , La Distancia e Intramundo se hicieron oír en una lista de 12 temas donde finalizaron con Dimensión Vulcano, para aplauso general del público que se acercó hasta la calle Niceto Vega a escucharlos.
Como sorpresa, quedó para el cierre el debut total de Tenebre y los Apocalípticos, una formación mixturada entre Poseidótica y Carca, en la cual regalaron al público como despedida de año, un emotivo homenaje al rock nacional, donde sonaron sentidas versiones de Yendo de la Cama al Living de Charly García, No Hay Tiempo de Mas de Manal, Duro Invierno de Riff, una potente e increíble versión de El Probador de Virus y para cerrar, la magistral creación de Miguel Abuelo “Tirando Piedras al Río”, luciéndose “El Teacher” en voz y tapping final con su Flying V, en fin un show inolvidable para el aguante local.
